La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha contratado a un equipo de investigadores que se harán pasar por clientes para comprobar cómo se distribuyen los productos financieros en España.
Los detectives privados actuarán como clientes misteriosos recorriendo las sucursales españolas para conocer de primera mano si los bancos cumplen todos los preceptos requeridos para comercializar productos financieros.
El principal objetivo es detectar irregularidades en aquellos productos que se venden en avalancha a particulares, especialmente instrumentos complejos y fondos de inversión.
La medida de la utilización del mystery shopping como herramienta de supervisión y prevención ha llegado tras la solicitud de la actual presidenta de la CNMV al Ministerio de Economía. Después de numerosos trabajos para dar con la fórmula jurídica más adecuada, los detectives ya están trabajando como falsos clientes, identificándose como inversores o ahorradores de un determinado perfil, con el fin de detectar posibles incumplimientos de las normas de conducta esenciales en cuanto a la comercialización de productos financieros.
El principal objetivo es detectar irregularidades en aquellos productos que se venden en avalancha a particulares, especialmente instrumentos complejos y fondos de inversión.
La medida de la utilización del mystery shopping como herramienta de supervisión y prevención ha llegado tras la solicitud de la actual presidenta de la CNMV al Ministerio de Economía. Después de numerosos trabajos para dar con la fórmula jurídica más adecuada, los detectives ya están trabajando como falsos clientes, identificándose como inversores o ahorradores de un determinado perfil, con el fin de detectar posibles incumplimientos de las normas de conducta esenciales en cuanto a la comercialización de productos financieros.
Fuente: Cinco Días