¿Sospecha que uno de sus franquiciados puede estar incumpliendo su contrato? ¿Teme que esté dando una mala imagen de su marca o que la atención al cliente sea nefasta?
Cuando en una relación de confianza como la que ha de establecerse entre franquiciado y franquiciante surgen este tipo de dudas, la falta de información puede provocar grandes pérdidas económicas y que finalmente la situación llegue a ser insostenible.
En estos casos, la información y pruebas proporcionadas por un detective privado son clave a la hora de tomar decisiones si se llegara a confirmar que existen irregularidades por parte del franquiciado, y el informe aportado por el detective podría ser ratificado en sede judicial si fuera necesario.
Las investigaciones más habituales relacionadas con franquicias son:
- Obtención de información previa del franquiciado.
- Investigaciones sobre la gestión que está llevando a cabo.
- Detección de una posible competencia desleal.
- Verificar si se están realizando los protocolos pactados correctamente.
- Confirmar que el uso de la marca se está haciendo adecuadamente.
- Comprobar si la atención al público se lleva a cabo con la calidad que requiere.
- Investigaciones relacionadas con el incumplimiento de contratos de exclusividad.
- Determinación de si los precios de venta, acondicionamiento del local, imagen del personal, cambios en la marca, etc. se están llevando a cabo conforme a lo acordado.